NUESTRA MISIÓN
Ministerios Un Nuevo Comienzo, No es una congregación más, sino un remanente, una voz que clama en el desierto, una luz que dispersa las tinieblas, nuestro legado no es humano, sino divino, no es temporal, sino eterno, fuimos escogidos para proclamar con poder y autoridad el evangelio de nuestro Señor Jesucristo, fuimos llamados a ser luz y sal en medio de un mundo oscuro infectado por el pecado y la rebelión, fuimos llamados para ganar almas y llevarlas al reino de la luz.
Lucas 19:10, Mateo 4:18-20, Proverbios 11:30, Santiago 5:20, Marcos 16:15-16, Romanos 10:14-21, Hechos 1:8, 2 Corintios 5:20, Lucas 15:10, Lucas 10:19.
Ministerios Un Nuevo Comienzo debe de ser casa de Dios y puerta del cielo, somos una familia de fe, redimida por la Sangre de Nuestro Señor Jesucristo, un altar de adoración, un refugio para los quebrantados, un hospital para los enfermos, y un ejército que batalla en oración y no se deja gobernar por el pecado. Nuestra fe no se basa en emociones pasajeras, sino en la verdad inquebrantable e infalible Palabra inspirada por El Espíritu Santo. Creemos que el Espíritu Santo sigue obrando con poder, avivando corazones y preparando un pueblo santo para el glorioso regreso de Cristo, por esa causa debemos de consolidar a las almas ganadas para Cristo.
Gálatas 6:10, Efesios 2:19, Mateo 21:13, Juan 13:34-35, Gálatas 6:1, Hechos 10:34, Gálatas 6:2, Santiago 2:9, 1 Juan 4:7-21, Juan 21:15-17, Lucas 10:25-37.
El sacrificio en la cruz no representa nuestra derrota, sino es la representación del mayor triunfo de la historia, La sangre de Cristo sigue teniendo poder y por ello, no callaremos, no retrocederemos, no desmallaremos, no descansaremos, El tiempo se acelera, el cumplimiento de las profecías es evidente, el Rey viene pronto, y su iglesia necesita estar preparada para recibirle, somos una academia donde se preparan a los mejores soldados del ejército de Cristodispuestosadarsuvidaporcausadelevangeluo por esa razón debemos de trabajar duro para discipular a todas las almas.
1 Timoteo 2:4, Hechos 26:18, 1 Corintios 3:6-7, 2 Timoteo 2:2, Colosenses 1:28-29, Efesios 4:11-12, Lucas 6:39-40, 2 Timoteo 2:1-2, 2 Timoteo 3:16-17, Gálatas 1:17-18, Hechos 18:24, Hechos 18:26, Mateo 20:17, Marcos 4:34, 2 Timoteo 4:2, Juan 8:31-32.
El tiempo es ahora. La eternidad está en juego. Nos levantamos con autoridad, porque hemos sido llamados para marcar la diferencia en esta generación, por lo tanto, debemos de cumplir con la misión interna y externa que nuestro Dios nos ha encomendado.
Efesios 2:10, 2 Corintios 1:21-22, hebreos 10:25, hebreos 13:17, 1 Corintios 15:58, Colosenses 3:23-24, (Mateo 28:19-20 – texto masorético) Hechos 2:42-47.